El uso de puertas automáticas cada vez está más extendido. A día de hoy es fácil encontrarlas en accesos a garajes, edificios, organismos públicos, sanidad, comercios, etc. Su uso también es habitual en todo tipo de empresas, ya no solo a nivel de almacén y logística, sino también en edificios de oficinas, donde cada vez se instalan más para accesos interiores. Por eso, para proteger a los trabajadores de las empresas, es fundamental conocer los riesgos laborales de las puertas automáticas, que vemos en Martín Vecino. En este caso nos centramos en los usuarios de las puertas, no a los instaladores ni mantenedores de las mismas.
Cuáles son los riesgos laborales de las puertas automáticas
Aplastamiento o atrapamiento
Es quizá el riesgo laboral más frecuente asociado al uso de las puertas automáticas. Puede producirse por un fallo en el funcionamiento de las células fotoeléctricas o sistemas de detección en la puerta, en el sistema anticaída o en el sistema de bloqueo.
Podemos englobar también aquí un encerramiento de un trabajador provocado por un fallo en el funcionamiento de la puerta.
Problemas por golpes o enganches de personas
Muchas de las puertas en naves o almacenes, así como otras de garaje, se abren de manera vertical. Si el trabajador se aproxima demasiado a la puerta, puede quedar enganchado si la puerta cuenta con salientes.
También puede fallar el sistema de retención de la puerta, o producirse un descarrilamiento de la misma, golpeando al trabajador o a su vehículo al pasar.
Asimismo, muchas puertas de acceso para vehículos cuentan también con una puerta peatonal. En el caso de que el mecanismo de la puerta se accione cuando un usuario está utilizando el paso peatonal de la misma, pueden producirse golpes o accidentes peligrosos.
Riesgos eléctricos
Cuando las puertas se accionan con un mecanismo eléctrico (botón, pulsador, etc) pueden producirse accidentes por contacto eléctrico, bien por fallos en la tensión, por un cortocircuito, falta de protección del mecanismo en exteriores, etc.
Atropellos
Finalmente, otro de los riesgos laborales de las puertas automáticas son los atropellos que pueden producirse en en puertas de acceso de vehículos. Puede suceder por una mala señalización, por no guardar distancias suficientes con zonas interiores del recinto, por el uso simultáneo del acceso para personas y vehículos, etc.
Cómo evitar los riesgos asociados a las puertas automáticas
Por un lado, las puertas deben estar correctamente instaladas por profesionales acreditados del sector. Esto es sinónimo de garantía de seguridad.
Por otro lado, es primordial que se realicen las revisiones y el mantenimiento periódico de todas las puertas automáticas. Es la mejor manera de garantizar su correcto estado y un funcionamiento seguro.
Finalmente, cada empresa debe formar a sus trabajadores sobre los riesgos laborales de su puesto y entorno de trabajo. Esto incluye, por supuesto, el uso seguro y responsable de las puertas automáticas.
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