Hoy en Martín Vecino explicamos qué son las puertas automáticas industriales de alto rendimiento y qué ventajas presentan en los lugares donde se instalan.

Qué son las puertas automáticas industriales de alto rendimiento

Las puertas automáticas industriales de alto rendimiento se engloban dentro de la familia de las puertas rápidas industriales.

Se trata de puertas que permiten un sistema de cierre y apertura rápido y seguro en entornos de actividad intensa. Su instalación se realiza sobre todo en el interior de fábricas y empresas, aunque también pueden utilizarse como cierre exterior.

Entre los lugares más frecuentes para su instalación se encuentran las empresas industriales. Por ejemplo, almacenes, centros logísticos, instalaciones farmacéuticas, de tecnología, de procesamiento de alimentos, fábricas, etc.

También se emplean para entornos protegidos como los laboratorios y las salas blancas y para uso en garajes tanto del ámbito privado como público.

Cuáles son sus principales características

Las puertas automáticas industriales de alto rendimiento permiten mantener la temperatura del lugar donde se instalan. Es decir, son ideales para garantizar la eficiencia energética.

Por otro lado, ayudan a optimizar el flujo de personas y mercancías, incrementando la eficiencia operativa, la productividad y reduciendo costes.

Al mismo tiempo, contribuyen a proteger la maquinaria, fomentando una mayor higiene en los procesos y la seguridad de los trabajadores. De este modo, se evitan o se reducir los accidentes laborales.

Además de esto, se trata de puertas que requieren poco mantenimiento, lo que redunda en una reducción de costes. Esto, sumado a su gran durabilidad y su estupenda estanqueidad, las hace idóneas para numerosas localizaciones.

Cabe destacar que las puertas automáticas industriales de alto rendimiento se fabrican tanto en lona como en material rígido, dependiendo de las circunstancias particulares de cada caso.

Finalmente,  son puertas que pueden personalizarse y adaptarse a las necesidades de cada cliente. Por ejemplo, eligiendo una apertura en horizontal o en vertical.